Solo un paseo por la asquerosa playa

Era un día de los que comunmente suelen llamarse "hermosamente soleados", lo curiosos era que yo no compartía esos pensamientos, para mi los días soleados eran lo peor del mundo (sin aceptar llegar a la palabra deprimentes) y resultaba que mi escuela quedaba en una isla y la mayor parte de los días salía el sol, el cielo frecuentemente estaba despejado y escasas veces llovía y cuando lo hacía era imposible salir a hacer deporte ya que se trataba de tormentas estruendosas.
Hoy no contaba con los animos necesarios para salir, pero quedarme encerrada en mi cabaña no era lo mío, permanecer quieta durante mucho tiempo me volvía ansiosa y por lo tanto terminaba volviéndome hiperactiva.
Andres ultimamente se la pasaba con la chica nueva de Trytian y no estaba celosa de ello (bueno un poco en realidad) pero nada que no pudiera controlar, simplemente al verlo ahora a lado de ella y una Trytian me provocaba una clase de coraje que me hacía desear tomar a la rubia esa entre mis manos y degollarla o hacerla sufrir lentamente, que su dolor me deleitara y sus gritos agónicos se volvieran música para mis oídos.
Sonreí de manera divertida pensando en las mejores torturas.
Sin darme cuenta había llegado hasta el muelle, no había imaginado que tan distraída estaba sumida en mis pensamientos "sádicos", pero no me importó y seguí ideando más...
Aturdida sacudí mi cabeza, desorientada y confundida, un poco aterrada por la clase de monstruo que había dentro de mí, algo que quería reprimir a toda costa y demostrar que yo no era como toda mi familia.
Algún dia tendrá que suceder
Siempre decían eso como si esperaran que en cualquier momento alguna clase de detonador se activara y me uniera a su "bando". Estaba demasiado segura de mí misma, pero aún así tenía miedo de que ellos tuvieran razón, en mi casa había visto cosas demasiado sobrenaturales incluso entre los nuestros.
Me despeiné el cabello con desesperación y miré a todos lados como si me observaran desde algún lugar, cuando giré mi cabeza hacia la derecha había un chico a unos metros de ahí, nunca lo había visto, probablemente otro nuevo. Pero había algo muy extraño en él... no podía decir que me "llamaba" pero podía sentir algo raro, no quise mirarlo de ninguna manera pero me provocaba curiosidad y no pude apartar mi vista de él.

Sentí como poco a poco me ponía roja y de pronto el calor de se intensificó en el ambiente, pero sabía que no era a causa del sol, era yo.
Inmediatamente traté de recobrar la compostura y cerré mi boca que se había quedado entreabierta; noté el tono agrio de su voz, no parecía tener intenciones amables.
Suspiré resignada ya que en parte había sido mi culpa.
-Hola...-mustié a regañadientes- ¿Quien eres?

Curiosa voz, sonaba como si la hubieran pillado haciendo algo malo...Sonrei de lado:
-Ludwis Von Weillschmidt- Le dije no siendo desagradable, tampoco tenía intereses de que me saliera alguna de esas chicas peleadoras... solo queria que se fuera y ya... ho y no tenia deseos de gastar mi tiempo con nadie.

Su nombre me parecia vagamente conocido pero no sabía de donde, quizá no fuera nada importante. Me acerqué a él, siendo entrometida tal vez, pero tenía curiosidad.
-Alexia Maysonet-me presenté tanteando el terreno que estaba pisando- un placer... supongo. Me doy cuenta que eres nuevo... ¿de donde vienes?
Intentaba ser amable y sin pretender incomodarlo o molestarlo.
Me tomé el atrevimiento de sentarme un poco mas cerca de él, aunque manteniendo la distancia adecuada para que no pensara algo más.

En esta clases de dias soleados me gustaba ir a dar un paseitopor ahi...buscar cosas nuevas..aventurarme un poco..en fin...cualquier estupidez que se me crusara estaria bien...sobre todo ahora que estaba a punto de morir ahogada en un mar de aburrimiento. Camine hacia el muelle y me quede parada viendo el oceano y senti una pequeña brisa que..por alguna razon...me causo escalosfrios. Me gire y pude divisar a Alexia y a otro chico..ambos sentados...simplemente les dedique una sonrisa y una mirada de ...curiosidad...supongo-..al chico..el cual supuse seria nuevo, o algo por el estilo, gire mis ojos blancos...no me iba a quedar viendo al chico todo el tiempo..seria un tanto extraño, asi que volvi a divisar el oceano totalmete metida en mis pensamientos-

La chica fue y se sento, mm.. Maysonet...me sonaba, mucho...en fin, sonrei de lado pero aun asi ni la mire, tampoco tenia ganas de divertirme con ninguna chica hoy... Aunque se ofreciera voluntaria...
-Alemania- le dije simplemente, entonces se me ocurrio q tal si sabia de donde venia podria reconocer su apellido ... -¿y tu?- le dije, vaya...mas gente curoseando...espero q esta si se vaya y no moleste...

Quiza fuera de mala educacion escuchar conversaciones ajenas...pero ese chico generaba sierta curiosidad en mi... me sente por alli, ni tan serca ni tan lejos, y escuche atentamente, mientras fijaba la vista en el horizonte...aunque como estaba usando el Byakugan...podia ver todo a mi alrededor-

Su actitud era tan fría y distante, no me importaba en absoluto, de hecho me recordaba mucho a la primera vez que intenté entablar conversación con Pablo... y a los siguientes intentos... Pero sabía que Pablo era mucho mas diferente que él, porque Ludwig me recordaba mucho a mi mundo y casi nada que venía de ahí era agradable. Probablemente lo estaba molestando, pero yo era tan cínica que no me importaba, ahora. Mas allá me percaté que Hinata daba un paseo, podría ir mejor a saludarla y charlar con ella antes que perder mi tiempo con la roca de a lado, pero Ludwig Von Weillschmidt me daba mas curiosidad puesto que podría tratarse de alguien con pensamientos propios de mi familia, su nombre me sonaba pero a la vez no mucho y debí suponer que se trataba porque yo no estaba tan relacionada.
-Mexico-le contesté después, pero había tan poca información que manejar que añadí a mi pesar- eres sangre pura ¿verdad?

¿Así que México? umm... mi mente comenzó a armar rápidos
enlaces... Maysonet... México... enseguida supe de quien se trataba, la familia
Maysonet era una de las mas importantes familias de sangre pura en México, unos
de los pocos que aun conservaban el verdadero honor de ser un sangre pura, y el
jefe de la familia Maysonet era también uno de mis principales aliados en el
plan que se debía llevar a cabo.


Sonreí mirándola con ironía... chica importante, quizás
fuera una herramienta útil...


Me gire a mirarla, y me quede algo sorprendido, ¡vaya! era
la chica del bosque y de la pelea con el profesor... No esperaba que fuera ella
y la verdad luego de considerar que no era importante la había olvidado por
completo, tendré que hacer con más cuidado mis exámenes... aunque por otra
parte, muy de la familia Maysonet podría ser pero no se parecía en nada a ningún
miembro de la familia que yo hubiera podido conocer antes...


Más bien me recordaba a la detestable de mi
"primita"...Seguí mirándola de manera penetrante evaluándola por
completo... cuando preguntó por la sangre, mi sonrisa se congelo un momento,
aunque volví a la normalidad enseguida.
- Oh claro que si... si eres de la familia Maysonet, debes haber asistido a
algunas de las fiestas que da mi familia...- le dije en tono falsamente
empalagoso, mi sonrisa era más que cínica y bordeaba la frialdad, no sólo era
una patética renegada, si no que, además, había cometido el error de recordarme
que era exactamente yo.
Detestaba a los muggles, aun mas a los sangre sucia, pero definitivamente una
de las cosas mas repugnantes eran los magos sangre limpia que no se comportaban
como tal... Estuve apunto de hacer un gesto de hastío pero me contuve a
tiempo... Era evidente que la chica era una de esos, quise pulverizarla con un
ataque... un simple ataque y ella seria polvito de estrellas.
Sin embargo contrario a mis sentimientos sonreí más y me acerque un poco a
ella, tomando con delicadeza su mentón y alzando su cabeza para mirarla directo
a los ojos.
- Pero umm... me parece no haber visto nunca por mi mansión a tan "bella"
señorita- dije seductora y oscuramente, me acerqué un poco más y baje mi cabeza
a su cuello, olfatee su perfume, y volví a una expresión algo mas fría, después
de todo no quería asustarla demasiado... no "aun".
- Me gusta mucho tu perfume- le dije con media sonrisa mientras me volvía a mi
sitio original... a unos cuantos pasos de ella.

Por un momento me quedé pasmada al tenerlo tan cerca de mí, no porque era muy guapo y el aliento que golpeaba mi rostro delicioso, si no porque entonces, al escuchar su voz detenidamente, con atención me di cuenta que él y el chico misterioso de Death Island eran el mismo, lo había olvidado, Su nombre... y había atribuído conocer su apellido por las relaciones de mi familia, pero no fue especialmente por eso... "Von Weillschmidt" una familia que tenía mucha importancia dentro de la sociedad mágica, algo parecido a la realeza en Alemania y yo los odiaba... no me agradaron nunca, toda esa bola de dignos "sangre pura"... aunque tampoco me gustaba ser prejuiciosa.

Esbocé una forzada sonrisa.

-Te regalaré uno para navidad-le dije sarcásticamente.

Nunca me gustaron los chicos que querían fingir y hacerme creer que yo era una chica linda, los detestaba, porque yo sabia que solo pretendian burlarse de mí, y no me gustaba que me vieran cara de tonta. Alexia Maysonet no es tonta.

Respire hondo controlando cualquier clase de ira y cuando hablé intenté dulcificar mi tono de voz, o simplemente normalizarlo.

-Claro, he estado en tu... mansión, tampoco recuerdo haberte visto antes... la verdad no pongo atención a todos los asistentes... solo quienes me interesan... y también parece que haces lo mismo... eso debe ser...

Suspiré me agradaba la compañia de la chica, pues verdaderamente era linda y no se quizas el que su caracter fuera tan brusco tambien me agradaba, de donde vengo son todas las señoritas tan simplonas...
-No gracias, prefiero el mio de todos modos, pero el tuyo no esta nada mal para una señorita- esta vez no me preocupe de sonreir, me daba la impresión de que esta chica no le agrada que finjan... no es que importe demaciado pero tampoco yo digamos que "adoro" esconder como soy...y por el insidente del bosque ella ya debe tener una idea aproximada de mí... La miré cuando hiso el comentario...había ido, umm... tampoco es raro que yo no la haya visto...jamas me dejan quedarme la fiesta completa, mis padres siempre insisten en "guardar lo mejor ante la vista" JA como si no supiera yo porque lo hacen, le dan demaciada importancia a sus relaciones diplomaticas con todos y la verdad de mi existencia sería mas de un escandalo...

-No creo, no miento cuando digo que eres linda... y yo jamas dejo de admirar a alguna belleza, puede que... simplemente yo no haya estado en las mismas fiestas...o me hayan echo irme antes- lo ultimo lo dije en un susurro... tampoco le importaba a ella ni nadie mi vida...guardé silencio y segui mirando el firmamento..esperando a que ella dijera algo o se fuera...total, daba lo mismo.

Suponía que él tenía razón, las cosas dentro de esa "sociedad" se desarrollaban de forma medio rara, todos eran extraños ahí y los que no lo eran aparentaban serlo, me incluía en ese último grupo, a lo mejor él tambie, a lo mejor no, era difícil saber... bueno un poco difícil solamente.
Hice una mueca inconforme.
-No digas "admirar"-le dije de una forma que casi sonó como advertencia-es que pareciera que tratas con algún objeto de museo, te aviso, yo no soy un objeto... -suspiré no era momento de pelear por algo de poca importancia, había cosas mas intrigantes en él que lo que le dijera a todas las chicas, fui al grano. -Tu estabas en Death Island, al principio no te reconocí pero ya recordé, me atrevería a decir que tienes un buen manejo con las artes oscuras, aunque está de más, pensarás que ya lo sabes... pero hay algo que me intriga.. ¿porque huíste del Patronus?

Me puse rigido en mi sitio, debí suponer que preguntaria eso, maldito error...Sonreí con naturalidad aun asi y le dije como si fuera obvio - Pues porque todo ese asunto ya se extendia mucho y me pareció el momento propisio para irme..- la miré sonriendo... - debo reconocer ademas, que no eres para nada una mala bruja- le dije para que olvidara el tema.

Noté el pequeño cambio en su posición, pero desvié la vista al mar como si no me hubiera dado cuenta.
-M... claro, se ve que tu también eres buen mago... -me volvi para mirarlo y vi que sonreia y también sonreí...- bueno, creo que te estoy perturbando, creo que será mejor que me valla.

- jajaja no, para nada, solo me da la imprecion que hice de cobarde allí y por eso me sentía no muy comodo... pero olvidando aquello, la verdad si se hace tarde y comienza a enfriar...no quisiera yo que tan hermosa damicela se enfermara por mi culpa...¿nos vamos?- le dije mientras me levantaba y le ofrecía mi mano para que hiciera lo mismo...

-De acuerdo, vamos- iba a pararme sin tomar su mano pero lo considere de muy mal gusto asi que la tomé y me puse de pie.
Pero mi maniobra fue torpe y retrasada, cuando ya estaba casi parada tropece con mis propios pies y caí al suelo de espaldas, lo peor fue que no vine sola, traje a Ludwig conmigo y él cayó encima mío.
-Ah!-me quejé en voz alta cuando había caído sobre mis costillas aun un poco dañadas.
Su rostro estaba a un palmo del mío, podía darme cuenta de lo guapo que era, me atraían demasiado sus ojos y su aroma era una fragancia exquisita. Me quedé inmóvil y sin habla.

¿Y a este quien lo llamó?.... ¿es estupido?..o claro contestate solo, claro que lo es... Traté de controlarme a pesar de que mi humor no era el mejor...mi maestro estaba y tenía que respetar sus ordenes cerca de él...
-Mira inutil, no te vengas con amenazas de nenita...aun no he hecho nada- le dije conteniendo lo mejor que pude mi tono mientras me ponía de pie.
Me sacudí, y levante de un tiron a alex... Malditos molestos niñitos.

Me sorprendió mucho ver a Andres ahí y más en ese estado, ¿que le pasaba ahora? Me pare furiosa, no tenia porque venir y querer matar a todos los que se acercaran a mi sin importar sus intenciones.
Me interpuse entre su varita y Ludwig.
-¿Que doxy te mordió a ti?-refuté entre dientes- Él no estaba haciendo nada malo, fue un accidente... ¡Te he dicho mil veces que se cuidarme sola!
Me volví hacia Ludwig.
-Y tú ahorrate tus insultos que arruinas esa apariencia de principe que te pintas...

Movi lentamente a Alex de enfrente de mi varita y segui apuntando con ella al muchacho ese mientras lo miraba a los ojos, ahora si estaba furioso, me enfado la respuesta tanto de Ludwig como la de Alex. Pase mi vista de el muchacho a Alex y de nuevo a el chico.

- Inutil? Aun? mira invecil, el unico inutil aqui eres tu, quien mas huiria de un Patronus, solo un pobre debilucho como vos - Le conteste con voz agria y con un tono de frialdad muy marcado, mientras lo miraba seriamente al chico, examinandolo con la mirada - Resulta Alex que estaba dando una vuelta por el muelle cuando escucho unas voces no les doy importancia y sigo con mis cosas, luego me parese escuchar un gritito de alguien quejarse y reconosi tu voz, cuando mire al lugar de donde vino los encontre en tan linda situacion - Le hable con sarcasmo cuando mencione la palabra "linda", mientras seguia mirando a el muchacho apesar de estar hablandole a Alex -

-¿vienes a insultarme a mi?..perdon, pero no me queda muy claro ¿tu te das cuenta del ridiculo que estas haciendo?...tu reaccion es como minimo imbesil, y deja de comportarte como si fueras el padre de la nena, que me parece que ella se cuida sola...en serio idiota, madura..- le dije siendo lo mas suave que pude, y hablando en tono suave, pero lo unico que consegui fue que sonara como si me estuviera burlando de el, me encongí de hombros...era un chico imbesil.

Puse los ojos en blanco y apreté mis puños, los dos se estaban comportando tan... tan... hombres!! Les lancé miradas asesinas, primero a Ludwig y luego a Andres.
-Ok. De acuerdo... te agredezco que te preocupes por mí, pero... yo no voy e interrumpo tus "lindas" escenitas con... ¡Con quien sea! Ambos son un par de niños inmaduros.
Tomé a Andres del brazo.
-Mejor vámonos ya. -miré de nuevo a Ludwig-Adiós... y lamento esto.