- De acuerdo, es hora de subir. -Esbocé una sonrisa maliciosa-Siganme no quiero que terminen mas perdidas y teminen siendo la cena de Katú...
Les dije a las alumnas. Me di la vuelta en dirección a la salida, las guieé por los pasillos oscurecidos, aun sin entender como habían llegado tan lejos. Cuando al fin subimos al vestibulo me dirigi a las tres.
-Bien, chicas, me despido, recibiran mi citatorio pronto... Luciana, mañana despues de clases.