La noche habia caido y yo segia sin poder conciliar el sueño. asik despues de dejar a la pareja dentro del gimnasio habia llegado a los inmensos y verdes jardines de la academia, alli el silencio reinaba, no habia nadie en muchos metros, el aire estaba totalmene en calma y las estrellas brillaban mas que nunca, era el momento y el lugar perfecto para poder meditar... para recurrir a la poca paz que me daban mis poderes y que quedaba en mi vieja mente....
Me sente sobre el mullido cespe con las piernas cruzadas y una mano en cada rodilla, cerre los ojos y empece a perderme en el interior de mi mente, un pequeño, casi inapreciable, resplando empezo a salir de todas partes de mi cuerpo mis poderes empezaban a mostrarse...